La pareja lleva una relación que ha superado la década.
Fotografías: Mer Toñanez
Ayer jueves 3 de febrero, bajo la intensa lluvia que aplacó el calor de nuestro verano, en el Santuario Nuestra Señora del Rosario de Luque, Lizarella Valiente y Nenecho Rodríguez unieron sus vidas en matrimonio al recibir la bendición de Dios.
La novia llegó a bordo de un coche antiguo luciendo un vestido creado por Enrique Rivas que fue preparado con apliques de ñanduti bordados por las reclusas del Buen Pastor, quienes forman parte del programa de inclusión social que crea moda sostenible. También usó joyas de filigrana para complementar el look. Mientras que Nenecho la esperó en el altar ataviado con un traje verde claro confeccionado con una tela brillosa.
La novia entró acompañada de su hijo, Oscar Emmanuel, y los anillos fueron entregados al altar por su hija mayor, Yadhira. Luego del beso y las felicitaciones en el atrio de la iglesia, se dirigieron hasta la Casita Quinta para disfrutar con sus invitados.
Tanto la iglesia como el centro de eventos estuvo decorado con una temática inspirada en la naturaleza, mucho follaje y flores blancas, una decoración bastante austera que contrastaba con una delicada mesa de dulces.
En el local de la recepción, los novios se unieron ante la ley de los hombres y fueron testigos de este matrimonio, los hermanos de la novia y del novio; además de sus amigos de su círculo más íntimo.
Además de los tragos y el exquisito buffet, los invitados disfrutaron de un show impecable ofrecido por Héctor Candia, quien amenizó el ambiente durante la cena. Posteriormente, estuvieron en escena Los Ojeda, amigos muy cercanos a la pareja.
En medio de esta actuación, Nenecho y Lizarella subieron al escenario para cantar una canción, actividad de la cual disfruta mucho esta pareja, pues ya los hemos visto cantando juntos en varias ocasiones. La canción elegida fue “Regalo de amor”.
Posteriormente, la pareja compuesta por Pipino Cuevas y Alicia Ramírez, regaló a los novios la interpretación de la canción “La Pareja Ideal”.
Para el momento del baile, la novia apareció con otro atuendo, un vestido corto y ceñido que resaltaba su figura y que también fue preparado por Rivas quien siguió con el patrón original de apliques de ñandutí. Los invitados bailaron hasta el amanecer al ritmo de mucha música urbana y cumbia nacional.
Cabe recordar que Nenecho y Lizarella llevan una relación que ha superado los 10 años.
